El intenso comercio marítimo impulsa la concentración, la especialización y la polarización territorial, estableciéndose criterios de prioridad y de selectividad portuaria por parte de las compañías marítimas y de las propias terminales portuarias. El patrón de crecimiento responde a:
- las correspondientes matrices comerciales origen/destino;
- a la implementación de ventajas competitivas;
- a la existencia de redes logísticas que permiten atraer, captar y concentrar mercancías y productos en áreas más extensas en el interior de los países;
- a las propias infraestructuras y prestaciones de servicios portuarios.
Así, para 2005 en los veinte primeros puertos mundiales de contenedores se manipularon el 56% del total de TEUs, destacando que los cinco primeros están situados en el continente asiático y solo aparecen cuatro puertos europeos entre los veinte primeros lugares como se observa abajo en la siguiente tabla.
Se han abierto nuevos mercados y las comparaciones entre los puertos atendiendo a su especialización, inclusión en rutas y alianzas empresariales reflejan los distintos ámbitos de su posicionamiento. Al mismo tiempo, los procesos de fusión y adquisición de empresas han impulsado una dinámica de concentración empresarial muy notable. De esta forma, si en el año 1996 las 25 primeras compañías concentraban el 71% de la capacidad de trasporte marítimo, en el año 2006 dicho porcentaje asciende al 86,4%.
Dichos procesos de crecimiento, de concentración y de desarrollo logístico permiten la conformación de los hubs. Su dinámica va pareja con el desarrollo de la contenedorización y la intermodalidad. Con anterioridad a este desarrollo, los trasportes marítimos se efectuaban de “puerto a puerto” pero, en la actualidad, se realizan de “puerta a puerta”, de esta forma, se concentrar los contenedores en un mismo recinto y por medio de una amplia red de servicios se pueden distribuirlos a otros puntos. Así, se conforma un hub, una red y unos servicios feeders o alimentadores que unen el hub con los otros lugares de producción y consumo.
Puerto de Singapur
Un hub requiere, en consecuencia, un amplio recinto que esté conectado con varios lugares. Los hubs se desarrollan preferentemente en lugares idóneos para efectuar ese almacenaje y distribución, puesto que sirven como plataforma de acogida y de distribución de mercancías.
De esta manera, los puertos apuestan por la mayor sinergia con sus hinterlands más próximos y con el establecimiento de redes de conexión con otros modos de transporte al objeto de potenciar las infraestructuras y los servicios portuarios puestos en funcionamiento. No es casual, por lo tanto, que emerjan una serie de vínculos y de relaciones de proximidad económica que vinculen el puerto con los hinterlands.
Fuente:Tomado y adaptado de: Instituto Universitario de Estudios Marítimos